lunes, 31 de mayo de 2010

La Visitación de la Virgen: una impecable puesta en escena

Hoy es la Fiesta de la Visitación de la Virgen a su prima Santa Isabel. El Evangelio sólo dice que María se dirigió “a la montaña, a una ciudad de Judá” (Lc 1,39), pero una antigua tradición, anterior al siglo VI, localiza ese encuentro en Ain-Karim, a 7 kilómetros al oeste de Jerusalén. Allí pude estar el verano pasado, como veis en las fotografías que siguen, durante una estancia de tres semanas en Tierra Santa.



A la izquierda se me ve con dos amigos (un austríaco y un inglés) delante de la fachada porticada, que tiene encima un inmenso mosaico con la Virgen sobre una burra, en su trayecto hasta Ain-Karim. A la derecha, una escultura a tamaño natural que representa el momento del saludo, con Santa Isabel embarazada de tres meses; está en la explanada que precede a la iglesia y detrás azulejos enlosados con el canto del Magnificat en más de 80 lenguas. Más a la derecha, una vista de la fachada. Y debajo, un mosaico del interior que recuerda la acción del Espíritu Santo en ese encuentro.

El cine se ha ocupado poco de este pasaje. Se recoge en “Living Christ Series” (1951-52), de John T. Coyle, un serial de 12 capítulos de media hora sobre la vida de Jesús, y tan solo en dos ocasiones más: “Jesús de Nazaret” (1977), de Franco Zefirelli; y “La Natividad” (2006), de Catherine Hardwicke. De todas, la mejor es sin duda la de Zeffirelli, pues Hardwicke omite –incomprensiblemente– un texto clave para entender esta escena: el Magnificat, el texto más largo e importante que ha salido de los labios de la Virgen.

En la secuencia de “Jesús de Nazaret” destaca su calidad fotográfica, que podemos apreciar en la composición de los grupos, en la puesta en escena y en los encuadres (donde advertimos la influencia de la pintura renacentista italiana, muy especialmente, la de Fra Angelico). En concreto, esta escena reproduce una composición pictórica muy semejante a la de una Anunciación de Fra Angelico: María permanece en pie mientras Isabel se arrodilla, y esta disposición —aunque de forma inversa— recuerda el esquema de aquella pintura, solo que aquí Santa Isabel suplanta al Arcángel en su misión de transmitir un mensaje a la Madre de Dios.

viernes, 28 de mayo de 2010

La Virgen tras la Resurrección: Madre de la Iglesia, Reina de los Apóstoles

Cierro hoy la trilogía mariana que he desarrollado esta semana con la miniserie “Jesús y su plasmación de algunas invocaciones a la Virgen. Dos escenas de aquella cinta nos han servido para verla como Madre de los cristianos (las bodas de Caná) y Madre de Cristo (Muerte y Sepultura de su hijo). La secuencia que hoy he escogido (la aparición de Cristo a los Apóstoles) nos ayudará a verla como Madre de la Iglesia y como Reina de los Apóstoles.

Todas las películas que han recogido este pasaje, muestran a los once Apóstoles timoratos, indecisos, sin convicción alguna. Les falta la gracia y el empuje –la Fe sobrenatural– que el Señor, primero, y el Espíritu Santo, en Pentecostés, les traerán a raudales para iniciar la misión de la Iglesia. El pasaje que os adjunto comienza justo después del encuentro de Jesús con María Magadalena. Llena de Fe y de una alegría desbordante, corre a decírselo a los discípulos, pero ellos no le creen...

Hasta aquí, como en los Evangelios. Pero hay una novedad en esta secuencia: con los Apóstoles está la Virgen, Madre de la Iglesia. Y su presencia (como señalaba Pilar Urbano en un comentario publicado en este blog) eleva el ánimo de esos hombres apocados, disipa sus dudas y temores, y les prepara para creer. Así prende en ellos el deseo de ver a Jesús... Y entonces, Jesús aparece.

miércoles, 26 de mayo de 2010

La Virgen en el Calvario y la Sepultura: Madre de Cristo

La escena cumbre de todas las películas sobre Jesús es siempre su muerte en la Cruz, junto con el descendimiento y la sepultura. En todas esas versiones cinematográficas vemos siempre a la Virgen como de fondo, abatida por los acontecimientos y en una actitud más o menos pasiva.

Pero hay una cinta (la miniserie “Jesús, 1999, de Roger Young) que ofrece una singular y preciosa interpretación de todo ese pasaje. La Virgen (encarnada maravillosamente por Jacqueline Bisset), en un gesto de amor maternal y de Fe llena de cariño, limpia el rostro lacerado de su Hijo y se arrodilla emocionada cuando unos hombres corren la pesada losa que cierra su tumba.

El fragmento que ahora ofrezco de “Jesús” (2’45“) es la mejor versión de esta secuencia que he visto en toda mi vida. Primero recoge, de forma sintética, un cúmulo de menudos detalles que los Evangelios refieren sobre la muerte de Cristo:

- Los soldados se reparten sus vestidos
- La naturaleza entera, y el Templo, sufren una fuerte sacudida
- El Señor se dirige al Padre: “¡Dios mío!, ¿por qué me has abandonado?”
- La Virgen, la Magdalena y San Juan acompañan a Cristo junto a la Cruz.
- Tiembla la tierra y se quiebran las rocas.
- Judas se ahorca

Y, a continuación, en abrupto y bellísimo contraste, la segunda parte de este clip muestra escenas altamente emotivas:

- Descienden a Jesús y lo ponen en brazos de María
- Traslado silencioso hasta la sepultura
- María limpia su rostro y lo perfuma
- Mientras corren la losa sobre la puerta de la tumba, la Virgen se arrodilla emocionada y todas las Santas mujeres con Ella.

De fondo, en esta segunda parte escuchamos el delicado canto “Pie Jesu”, en la versión de Andrew Lloyd Weber, interpretada por Sarah Britghtman, que resulta maravillosamente conmovedora.

Como homenaje a la Virgen, en estos últimos días del mes de mayo, quería compartir con vosotros este fantástico momento que descubrimos aquí como inequívocamente mariano. Por favor, decidme hoy también qué es lo que más os ha gustado de este pasaje: me encantará leer vuestros comentarios.

lunes, 24 de mayo de 2010

La Virgen en Caná: Madre de los cristianos

Entramos en la última semana del mes de mayo, y es lógico que en este blog prestemos un poco de atención a la figura de la Virgen en las películas: en concreto, a su papel en la vida del Señor. Comenzaremos por aquella escena –importantísima- en que dio comienzo su vida pública.

El pasaje de las bodas de Caná es quizás la escena menos veces representada en la pantalla. Fue recogida fugazmente en dos filmes mudos: “Vida y pasión de Jesucristo” (1907), de Ferdinand Zecca, y “Son of Man” (1915), de Adolph ZuKor. Tras sesenta años de olvido, fue reinterpretada, con resultados más que dudosos, en tres cintas polémicas: “Gospel Road” (1973), “La última tentación de Jesucristo” (1988) y “The Life of Jesus: The revolutionary” (1995). Su más fidedignas representaciones llegarían con “María, Madre de Jesús” (1999), de Kevin Connor; y, sobre todo, con la mini-serie “Jesús” (1999), de Roger Young, donde esta escena alcanza su máximo esplendor.

Sabemos que esa boda tuvo lugar al comienzo de la vida pública del Señor, poco después de que Juan el Bautista le señale ante Juan y Andrés como “el Cordero de Dios” y anime a estos dos a que le sigan. Este detalle es recogido fielmente en la película, pues ellos son los únicos acompañantes del Maestro en los festejos de Caná.

Lo más importante aquí es el papel central de la Virgen, su actuación maternal, atenta a las necesidades materiales de los hombres. Por eso se da cuenta, antes que ninguna otra persona, de que va a faltar el vino. Es propio de una madre, y también de un ama de casa atenta, darse cuenta de esos pequeños detalles. Debió de percibir que las jarras ya no subían de la bodega tan llenas como al principio, y comprendió que aquella alegre fiesta podría terminar en una situación molesta y embarazosa. Por eso acudió a su Hijo. Y aunque Él contestó: “Aún no es llegada mi hora”, Ella le conocía bien y supo intuir que sí era la hora, que sólo hacía falta que se lo pidiera. Y en un acto de audacia impresionante, dijo a los criados: “Haced lo que Él os diga”. Y consiguió el milagro.

sábado, 22 de mayo de 2010

Eduardo Verástegui organiza el Congreso Internacional “Unidos por la vida”

El actor Eduardo Verástegui es el padrino del primer Congreso Interna-cional “Unidos por la Vida”. Un evento que los organizadores califican ya de “histórico” y que tendrá lugar el próximo 23 de mayo en el Centro de Convenciones de Los Ángeles, California.

Con los fondos que se recaudarán en este congreso se financiará la apertura de un centro médico para la mujer en el centro de Los Ángeles, que ofrecerá atención médica gratuita de alta calidad a mujeres latinas de escasos recursos que estén embarazadas”, explicó Verástegui. “Se llamará Centro Médico Guadalupe y será un oasis de vida en medio de un desierto de muerte, ya que en la misma zona hay diez 10 clínicas que practican abortos”.

El congreso “Unidos por la Vida”, que durará desde las 7 am a las 7 pm, será un evento familiar donde participarán expertos y padres de familia, así como jóvenes y, sobre todo, miles de mujeres latinas. El acto se retransmitirá en directo por medio de Internet para todos aquellos que no puedan acudir y quieran disfrutarlo desde sus hogares. Los organizadores prometen que habrá entretenimiento, música, y que se podrán escuchar conmovedores testimonios junto a reconocidos conferenciantes.

Próximo estreno de un telefilme sobre Duns Scoto (1265-1308)

Acaba de terminar el rodaje de una película sobre el teólogo franciscano Duns Scoto (1265-1308), beatificado por Juan Pablo II en 1993, que explicó en sus obras la riqueza de la humanidad de Cristo y preparó así la base teológica para la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción.

La película, de 90 minutos, se pasará por las principales televisiones del mundo entero, y en ella han trabajado más de 100 personas, muchas de las cuales no son católicas. Por primera vez en la pantalla podremos asistir al rezo completo del Avemaría.

El proyecto ha sido promovido por los Franciscanos de la Inmaculada, que han querido mostrar la vida de este beato a través del cine. Como señala el padre Alfonso Angelo, promotor de la cinta: “Creemos en el valor y la importancia del Séptimo Arte, de la contribución que puede dar a la evangelización y ala construcción de una cultura basada en valores”.

viernes, 21 de mayo de 2010

El impacto multi-sensorial del cine sobre el espectador

Hablábamos anteayer en este blog de la capacidad sugestiva de las películas, de su enorme capacidad de influencia psicológica. Ciertamente nos fascina y nos transporta a otros mundos. Pero esta fascinación, cuando acontece en una sala cinematográfica, parece como si se multiplicara por diez.

Y es que el cine ejerce sobre los espectadores un impacto multidimensional, porque afecta simultáneamente a todos nuestros sentidos, y es casi imposible no dejarnos arrastrar por la trama del filme o de la teleserie. Esto, llevado hasta el extremo, es lo que explica esos fenómenos de fascinación -y hasta de "locura" colectiva- en estrenos cinematográficos como el de "Luna nueva", del que ya hablamos en otro post.

A diferencia del periódico o de la revista, que afectan sólo al sentido de la vista; o a diferencia de la radio, que incide sólo sobre el oído, el cine influye en varios sentidos al mismo tiempo. Ofrece una imagen cautivadora y estética, como la pintura o la fotografía (cuidando el encuadre, la composición, la luz); pero añade a la vez la sugestión del movimiento (como en la danza); y, al mismo tiempo, nos envuelve con la banda sonora (como en una audición musical); y realza la acción con efectos de sonido: la modulación de la voz, la retórica verbal, los diálogos…

Todo ello actúa simultáneamente en nuestro interior, en nuestra capacidad cognitiva y en nuestras emociones, y nuestra mente es incapaz de separar esos diferentes estímulos y anteponer para cada uno de ellos el filtro adecuado. En consecuencia, resulta muy difícil sustraerse al impacto que puede producir una secuencia bien planificada, y más aún atemperar el juego de emociones que va desarrollando el argumento del filme, pues la historia se “siente” al compás de la música, mediada por unos actores determinados, con una determinada opción interpretativa, bajo ciertos efectos de luz, de decoración, etc.

Y esto, insisto, provoca un impacto mayor en el cine. El propio ambiente de la sala contribuye a que “nos metamos” en la historia ficticia. Se apagan las luces, se enciende un proyector sobre una pantalla de grandes proporciones y arranca una música que procede de todas partes. Nada nos distrae de esa trama que comienza: no hay contertulios, como cuando vemos el televisor, ni llamadas telefónicas o tareas pendientes. Todo está pensado para invitar a la relajación y la contemplación; y, de hecho, los ojos no pueden mirar más que en la dirección de la pantalla.

jueves, 20 de mayo de 2010

“Un jesuita en el Reino del Dragón”: Documental en el 400 aniversario de Matteo Ricci

El pasado 11 de mayo se cumplieron los cuatrocientos años de la muerte de Matteo Ricci, misionero jesuita en China, uno entre los más grandes evangelizadores de este país, que abrió el camino a la inculturación del mensaje cristiano y dio impulso al diálogo entre Oriente y Occidente.

Para celebrarlo ha sido realizado un documental titulado: “Matteo Ricci, un jesuita en el reino del dragón” que cuenta la vida en el Sol Naciente de este misionero. La película ha sido rodada entre Italia y China y presenta imágenes sobre los lugares en los que nació, creció y se formó Ricci, quien vivió entre los años 1552 y 1610. Gjon Kolndrekaj, director del documental, ha obtenido por primera vez, por parte del gobierno chino, el permiso de entrar libremente a hacer las grabaciones en lugares como la Ciudad Prohibida.

De 60 minutos de duración, y distribuido por http://www.h2onews.org/, el filme está patrocinado por la Curia General de la Compañía de Jesús y por la diócesis de Macerata, donde nació Ricci.

En una carta enviada en mayo pasado a monseñor Claudio Giuliodori, obispo de Macerata, Benedicto XVI subrayaba "la profunda simpatía que promovía por los chinos y por su historia, por sus culturas y tradiciones religiosas", haciendo que "su apostado sea original y, podríamos decir, profético".

"La última cima": Un sacerdote en las alturas (Estreno: 4 de junio)

El próximo viernes 4 de junio se estrena en cines el largometraje-documental "La última Cima", una producción de Infinito Más Uno, dirigida por Juan Manuel Cotelo.

Éste es el tag-line promocional: "Pablo, sacerdote, sabía que iba a morir joven. Deseaba morir en la montaña, al igual que Sara. Ambos entregaron su vida a Dios… y Dios aceptó la oferta. Ahora dicen que están vivos".

Pablo y Sara eran conocidos y queridos por un número incalculable de personas, que han dejado constancia de ello después de su muerte. De hecho, en la página web de la película pueden leerse más de 50 testimonios de personas que le conocieron, que se consideran amigos suyos, y que dan prueba de su enorme Fe, de su alegría sin límites, de su entrega atodas las almas. También pueden descargarse fotografías suyas, tráilers y fotos del filme, así como una biografía de Pablo, de la que extraigo estos párrafos:

Era buen montañero. Coronó todas las cimas españolas con más de 2.000 metros, cimas de Los Alpes con más de 4.000 metros, y otras mayores en América y Asia. Siempre que podía, celebraba misa en la cumbre.

Sacerdotes, monjas y gente de toda condición le pedían que predicara ejercicios espirituales, por todo el mundo. Y no sabía decir que no. Eso le llevó a un convento cisterciense en Tulebras (Navarra), en febrero de 2009. Les habló de la muerte, con alegría.

Al día siguiente subió al Moncayo (2.300 metros), la última cima española que le quedaba por conquistar. Las últimas palabras que dijo a su familia por teléfono, unos minutos antes de morir, fueron: “he llegado a la cima”.

La última Cima” muestra la huella profunda que puede dejar un buen sacerdote en las personas con las que se cruza. Y provoca en el espectador una pregunta comprometedora: ¿también yo podría vivir así?.

No es fácil encontrar hoy, en los medios de comunicación, modelos de buenos sacerdotes. En cambio, abunda la información, exhaustiva y detallada, sobre sacerdotes que dan ejemplo de mal comportamiento. Sabemos casi todo sobre ellos, gracias al trabajo de muchos periodistas, guionistas y directores.

La última cima” muestra un tipo de sacerdote del que nadie habla: los sacerdotes generosos, alegres, serviciales, humildes… Sacerdotes anónimos que sirven a Dios, sirviendo a los demás. Pablo es, nada más y nada menos, que un buen cura.

Esta película ha sido exhibida en pases privados, en España y Estados Unidos, conmoviendo a todo tipo de espectadores, creyentes y no creyentes. Es un largometraje de 82 minutos distribuida por Europeans Dreams Factory (la misma que trajo a España "Bella" y "Katyn", entre otros títulos). Su estreno en España será el próximo 4 de junio.

Mientras, dejamos aquí dos tráilers de la misma:


Trailer Película "La última cima" (4/6/10) PRÓXIMO 4 DE JUNIO EN CINES from infinitomasuno.org on Vimeo.


Trailer 2 - Película "La última cima" (4/6/10) PRÓXIMO 4 DE JUNIO EN CINES from infinitomasuno.org on Vimeo.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Cine y fascinación: la capacidad sugestiva de las películas

En los artículos anteriores, hemos reflexionado sobre dos aspectos del cine y de las teleseries que afectan a la esfera social: la legitimación de actitudes y comportamientos, y la “autoridad social” para representar un modelo válido de familia. Esto nos ha permitido conocer la influencia del audiovisual (cine y televisión) en la esfera externa y colectiva del ser humano: la influencia sociológica. Pero las pelícuklas y teleseries influyen también en la esfera interna e individual de la persona humana: ésa es su influencia psicológica.

Algo hablamos de esa influencia psicológica cuando abordamos el tema de la “transferencia de personalidad”. Ahora me gustaría añadir algo sobre la capacidad sugestiva de las películas: sobre cómo actúa el cine en nuestros mecanismos de cognición e interpretación de la realidad.

A poco que reflexionemos, nos daremos cuenta que la representación audiovisual (cine y televisión) posee una capacidad muy superior a la de otros medios de comunicación: prensa, revistas, radio, grabaciones musicales... Una capacidad superior para fascinarnos, para evadirnos de la realidad y transportarnos a otro mundo de valores. La representación en los filmes es siempre una experiencia viva y fuerte, emocionalmente dramática, y con frecuencia se acaba asimilando como una experiencia vivida. Puede alcanzar esa conmoción interior que los clásicos denominaban "catársis".

martes, 18 de mayo de 2010

La imagen de la familia en "Los simpson", "Padre de familia" y "South Park"

En días anteriores he hablado en este blog de cómo las teleseries "legitiman" conductas y modos de pensar, y también de la "autoridad social" que les hemos otorgado en la representación de la familia. Ahora leo este artículo de Xavier Gutiérrez, en el boletín "Análisis y Actualidad", que abunda en esta misma cuestión.

No hay nada como estar en familia. La chimenea calienta al fondo el hogar. La sala limpia y sobriamente decorada. Todos juntos en torno al único televisor de casa. Mamá y papá ocupan un lugar privilegiado en el sofá. Jennifer, la hija mayor, descansa la cabeza en el fuerte brazo de su padre. Tom se sienta en la alfombra, recostado en Bobby, el perro traqnuilo. Y el pequeño Nicky se ha quedado dormido en las piernas de su madre.

“¡Shhhhht! No hagan ruido”. Papá toma en brazos a Nicky y comienza a subir las escaleras. Toda la familia lo sigue. Lo deposita suavemente en su pequeña cama. Mamá lo cubre con su manta favorita. Jennifer le quita los zapatos y Tom llega con Teddy, su osito de peluche, para que no duerma solo. Entre besos y caricias se despiden del pequeño angelito. Con una risa apagada regresan todos a la sala. Bobby los recibe moviendo la cola. Papá enciende el televisor, dirige una mirada a su familia y, desde lo más hondo de su corazón, exclama: “¡Os quiero, hijos míos!”

Éste era el modelo clásico de familia que proyectaban en televisión allá por los años setenta. Pero hoy, los modelos de familia que aparecen en televisión son “un poco” diferentes.

"Los Simpson", la aclamadísima serie de la cadena Fox, será nuestro primer punto de referencia.

No hay nada como estar en familia. Homero, en calzoncillos, ocupa todo el sillón. Bart y Lisa tienen el control de la televisión y deciden qué ver. Generalmente será el Show de "Tom & Daly", una parodia de "Tom & Jerry" en la que el ratón termina explotando o mutilando al pobre gato. Marge aparece en escena. Refunfuña por ver tanta violencia y la tachan de mamá aburrida. ¿Dónde está el bebé? Nadie lo sabe. A nadie le importa.

lunes, 17 de mayo de 2010

La "legitimación" de conductas en el cine y las teleseries

En días anteriores hemos hablado de algunos efectos que el cine y las teleseries ejercen sobre las audiencias: la manipulación de las emociones, la transferencia de personalidad, los cambios en la percepción de la realidad, la atribución de una “autoridad social” indebida, etc.
Hoy quiero hablar de un efecto social aún más importante que todos los mencionados: la función de legitimación que las ficciones audiovisuales ejercen en nuestra sociedad. En su libro "Theories of film", AndrewTudor define así este efecto sobre el público: “Es el efecto, más potente que los habitualmente descritos, por el que las películas justifican o legitiman creencias, actos e ideas”.

Hoy en día, el cine ha legitimado conductas y percepciones de la realidad que hace sólo unos años provocaban el rechazo o la discrepancia moral de buena parte de la sociedad. Hoy, después de haberlos visto una y otra vez en filmes y teleseries, han pasado aser “normales”, legítimos. El cine les ha dado carta de naturaleza, ha establecido socialmente que son mucho más corrientes de lo que se piensa, que son plenamente válidos y, en todo caso, que deben verse como inevitables. Por eso invita al público a aceptarlos como “políticamente correctos”.

viernes, 14 de mayo de 2010

La "autoridad social" de las teleseries y su representación de la familia

¿Por qué las tele-series influyen tanto en los jóvenes? Hace un par de días hablábamos en este blog de la manipulación de emociones en el cine, y señalábamos que en la actual crisis de valores que afecta a la educación (en la escuela, en la familia, en la vida social), es la representación audiovisual dominante (cine y televisión) la instancia que les dice dónde está el bien y el mal, qué hacer para alcanzar una vida plena, cómo conseguir la felicidad.

En el fondo, el problema que subyace es el de la "autoridad" concedida a las imágenes televisivas. Ante la desorientación de los padres (o su indiferencia ante los valores, o su actitud permisiva, o la renuncia a su misión educativa), los jóvenes están concediendo más autoridad epistemológica (conocimiento de la realidad) y más autoridad deontológica (valoración de la realidad) a los modelos que plasman las teleseries que a los aprendidos en clase o en las conversaciones con sus padres.

Los modelos de familia de “Aquí no hay quien viva” o “Los hombres de Paco” (familias rotas, con segundos o terceros matrimonios; infidelidades conyugales y exaltación de la homosexualidad), la promiscuidad familiar de series como “Los Serrano” o “90-60-90”, y la fuerte carga sensual de muchas series para adolescentes (como “El Pacto”, “El Internado” o “Física y Química”) acaban pareciendo a los jóvenes más reales y auténticas que su propia experiencia como familia. Aunque son pura ficción, esas series tienen más “autoridad” sobre lo que es y debe ser la familia que el ejemplo de la suya propia vivida durante años.

miércoles, 12 de mayo de 2010

El cine y la manipulación de las emociones

En artículos anteriores hemos visto algunos ejemplos relevantes de cómo una película cambia pautas de comportamiento, de consumo o de percepción de la realidad. También hemos ahondado en las razones de esa influencia. Hoy quiero referirme a otro aspecto de esta discusión: el Séptimo Arte como educador -o manipulador- de los sentimientos.

El punto de partida es que el cine es hoy —lo ha sido casi desde su nacimiento— el medio de educación emocional más poderoso para jóvenes y adolescentes. Más importante que toda la educación formal o reglada (en colegios, institutos, centros de formación, etc.) , resulta hoy la educación informal que conforman indirectamente los medios de comunicación. Y, en esta sociedad audiovisual en la que vivimos (en la que la imagen lo es todo), el cine actúa como referente de todas las otras manifestaciones culturales: teleseries, videojuegos, novelas, internet. Ahí es donde "vemos" y aprendemos cuál debe ser nuestra respuesta emocional ante cualquier tipo de situaciones.

lunes, 10 de mayo de 2010

"Lourdes": milagro, misterio, conversión

Avalada por el Premio Signis y el Fipresci del Festival de Venecia y con el Giraldillo de Oro a la Mejor Película del Festival de Sevilla, llega a nuestras pantallas la singular Lourdes, tercer largometraje de la austriaca Jessica Hausner, una directora agnóstica que afronta los milagros atribuidos a la Virgen de Lourdes.

La película cuenta la peregrinación que hace Christine, con esclerosis múltiple, a Lourdes. Forma parte de una peregrinación organizada, con voluntarios de la orden de Malta, y al frente de la cual está el Padre Nigl. El grupo está formado por personas de lo más variopinto: unos más creyentes que otros, algunos envidiosos, otros frívolos, otros dados al chismorreo,… pero todos atravesados por el silencioso deseo de que en su vida irrumpa una novedad.

viernes, 7 de mayo de 2010

Entrevista sobre la imagen de Jesús en el cine

Hace seis meses, cuando llegó a las librerías mi libro "Jesucristo en el cine", me hicieron una entrevista simpática en el Ideal de Granada. Se publicó el mismo día de la presentación del libro en esa ciudad, y tocaba temas muy interesantes:

- "Parece que Jesucristo es del pasado y el cine del presente. ¿Qué sentido tiene un libro como el suyo?"

- "¿Por qué crean tanta polémica las películas sobre Jesús?"

- "¿Excede el papel de Jesús a todos los actores? ¿Por qué ningún actor que ha interpretado a Cristo ha vuelto a brillar después?"

- "¿Jesucristo realmente existe? Y si existe, ¿dónde está?".

Os dejo con ella para que la disfrutéis (Pincha "full" para verlo a pantalla completa, y "Escape" para volver al blog). Pero, ¡alto! Antes de cerrar, dime qué preguntas hubieras hecho tú: qué te gustaría que alguien te dijera sobre Jesús en el cine. Procuraré tenerlo en cuenta para futuros artículos. ¡Gracias por vuestra colaboración!

miércoles, 5 de mayo de 2010

Ética y representación fílmica: ¿es lo mismo el sexo que la violencia?


Anteayer comentaba la noticia de que la cadena americana ABC había despedido a un actor católico, Neal McDonough, por negarse a filmar escenas de sexo explícito en la serie Scoundrels que iba a protagonizar con Virginia Madsen. Por ser fiel a sus principios, el actor ha dejado de cobrar un millón de dólares.

Esta decisión ha suscitado un masivo apoyo de internautas en las más diversas páginas sobre cine. Por lo visto, la coherencia sigue siendo un valor muy apreciado en todas las culturas. Sin embargo, algunos han objetado que McDonough no ha tenido los mismos inconvenientes para representar papeles violentos. Y esto nos permite entrar en un tema muy interesante. ¿Plantea los mismos problemas éticos la representación de la violencia que la del sexo explícito?

El sentido común nos dice que no. Por eso en uno de esos debates sobre McDonough decía una mujer que, si su marido fuera actor, prefería mil veces verle disparando que en la cama con otra mujer.

Con respecto a la violencia, está claro que en todos los cuentos de hadas acaban muriendo el malo y sus secuaces, pero eso no daña en absoluto a los niños. No es la mera plasmación de la violencia lo que importa, ni tampoco el número de muertes, sino su puesta en escena, su representación: un solo acto de tortura puede ser infinitamente peor que la muerte de cientos de soldados en una batalla. Depende de cómo se represente, y se puede representar sin dañar la sensibilidad: aún más, mostrando la violencia como algo degradante e inhumano.

Sin embargo, el sexo no se puede representar sin realizarlo, al menos parcialmente. Como señala André Bazin, mentor de Truffaut y Rohmer, e inspirador de la Nouvelle Vague, la representación del sexo y la violencia son absolutamente diferentes, porque las escenas de violencia se representan mientras que las sexuales, en cierto modo, se viven. “En el cine -a diferencia de la pintura- a la mujer desnuda se la puede desear expresamente y acariciarla realmente y, sin embargo, si queremos permanecer en el nivel del arte debemos mantenernos en lo imaginario. Debemos poder considerar lo que pasa en la pantalla como un relato que no llega jamás al plano de la realidad, o en caso contrario, me hago cómplice diferido de un acto, o al menos una emoción, cuya realización exige intimidad. Lo que significa que el cine puede decir todo pero no puede mostrarlo todo. Se puede hablar de todo tipo de conductas sexuales pero con la condición de recurrir a las posibilidades de abstracción del lenguaje cinematográfico, de manera que la imagen no adquiera jamás un valor documental”.

Ana Sánchez de la Nieta ha publicado un artículo muy bien documentado sobre este punto, y comenta que, desde la perspectiva de Bazin, es perfectamente lógico que muchos directores rechacen el sexo explícito en sus películas y prefieran recurrir a la elipsis. El realizador finlandés Ali Kaurismäki, lo explica con elocuencia. En sus cintas, muy oscuras en ocasiones, retrata la vida de prostitutas o amantes pero nunca muestra sexo en las pantallas. “Cuando veo una película y llega la escena de sexo me siento siempre muy violento, y también el público, creo. Son situaciones privadas y me siento un voyeur. Todas esas secuencias parecen siempre la misma; pienso que en Hollywood tienen un stock al que acuden”.

Por otra parte, cabe también preguntarse: ¿quiere el espectador medio ver sexo en la pantalla grande? A juzgar por los datos de taquilla parece más bien lo contrario. Entre las 10 películas más vistas en el 2009 solo una –Resacón en las Vegas– tiene contenidos sexuales.

lunes, 3 de mayo de 2010

Despiden a un actor católico por negarse a filmar escenas de sexo

Cumplir con sus principios como cristiano y hombre de familia, le ha costado a Neal McDonough ser despedido de su papel protagonista en una serie de televisión. La cadena ABC alegó simplemente "cambios en el casting inicial". ¿La verdadera razón? McDonough se niega a realizar escenas de sexo explícito.

Según ha dado a conocer Kathleen Gilbert en Life Site News, la cadena ABC despidió a McDonough tras sólo tres días de rodaje de la serie llamada Scoundrels por negarse a realizar escenas de sexo explícito que debían ser rodadas con la actriz Virginia Madsen. La cadena de televisión esgrimió como argumento un cambio en la selección de actores.

McDonough, católico, está casado y es padre de tres niños pequños, ya había rechazado anteriormente rodar escenas de este tipo con la actriz Nicolette Sheridan, cuando interpretaba el papel de su marido en la quinta temporada de la serie «Mujeres desesperadas», también de la ABC, así como en la serie «Boombtown», de la NBC. De manera que los productores debían conocer muy bien los principios que este afamado actor no está dispuesto a traicionar.

Nacido en 1966 en Dorchester (Massachusetts), hijo de padres irlandeses, McDonough estudió Arte Dramático en la London Academy of Arts and Sciences. En 1999 obtuvo el Premio del jurado en el Festival de Atlantic City, y más recientemente, una nominación a los Screen Actors Guild Awards. Ha rodado más de 20 películas, entre ellas: Minority Report, Star Trek VIII: Primer contacto y Banderas de nuestros padres, y también series de éxito como la citada Mujeres desesperadas o la mini-serie Hermanos de sangre.

Por su trabajo en Scoundrels iba a cobrar un millón de dólares, pero no ha dudado en renunciar a ese atractivo sueldo por ser fiel a su Fe y a sus principios. Todo un ejemplo para los tiempos que corren.